El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, vetó este lunes un proyecto de ley que buscaba reconocer la minería de criptomonedas como una actividad industrial. Razonó que el alto consumo de electricidad de la minería podría obstaculizar la expansión de una industria nacional sostenible.
El decreto establecía que la criptominería utiliza capital intensivo con bajo uso de mano de obra y, por lo tanto, no generaría valor agregado a la par de otras actividades industriales. En todo el mundo, la criptomoneda es una de las mayores creadoras de empleo. El gráfico económico de LinkedIn muestra que la lista de trabajos de criptomonedas y blockchain aumentó un 615 % en 2021 en comparación con 2020 en los Estados Unidos.
De acuerdo con el patrocinador del proyecto de ley, el senador Fernando Silva Facetti, la ley tenía como objetivo promover la criptominería mediante el uso de excedentes de electricidad, pero el gobierno paraguayo optó por ignorar la actividad en el país:
1# Hoy recibimos de @PresidenciaPy el VETO TOTAL a Ley “Que regula la minería, comercialización, intermediación, intercambio, transferencia, custodia y administración de #CRIPTOACTIVOS” ignorando la existencia de esta actividad que hoy funciona en la sombra normativa. (abro hilo)
— FernandoSilvaFacetti (@FSilvaFacetti) 30 de agosto de 2022
El Senado de Paraguay finalmente aprobó la propuesta el 14 de julio, reconociendo la criptominería como una actividad industrial. Establecieron un impuesto del 15% a sus actividades económicas conexas, pero el decreto ve los tramos como un incentivo indirecto a la industria. Dice:
“Al subordinar la tasa aplicable a los usuarios de criptomineros a solo un pequeño porcentaje por encima de la tasa industrial actual, se ofrecería un incentivo industrial indirecto a la criptominería”.
Según el documento, en los últimos doce meses la inversión industrial creció 220% en el país a $319 millones, mientras que el PIB aumentó más de 4% en los últimos cinco años. De continuar este ritmo, la industria nacional podría requerir la cantidad total de energía producida y disponible en el país para mantenerse sostenible.
“Si Paraguay quiere intensificar la criptominería hoy, en los próximos cuatro años se verá obligado a importar electricidad”, decía el decreto.
El proyecto de ley aprobado por el Senado establece que los mineros tendrían que solicitar una licencia y solicitar autorización para el consumo de energía industrial. También estableció el Ministerio de Industria y Comercio como la principal autoridad de aplicación de la ley y la Secretaría para la Prevención del Lavado de Dinero o Activos para supervisar las empresas de criptoinversión.
Los bajos costos de la energía en Paraguay han impulsado a empresas locales y extranjeras a instalar infraestructura minera en el país desde 2020. En diciembre de 2021, los costos de electricidad para los hogares eran de $0,058 por kWh y los costos de electricidad para las empresas eran de $0,049 por kWh, según informes de precios mundiales de la gasolina.