La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) acusó a la empresa de medios y entretenimiento Impact Theory, con sede en Los Ángeles, de realizar una oferta no registrada de valores de criptoactivos en forma de tokens no fungibles (NFT). Según un comunicado de prensa oficial de la SEC, la empresa recaudó aproximadamente 30 millones de dólares de cientos de inversores a través de su oferta, violando las leyes federales de valores.
El panorama regulatorio en torno a las NFT ha sido de creciente interés para la SEC. Como criptopizarra Como se informó en marzo de 2022, la SEC había comenzado a investigar los mercados y creadores de NFT por posibles infracciones de sus reglas de valores. La atención se centró principalmente en el uso de NFT fraccionados, que se consideraban una forma de vender valores no registrados. Ahora, los cargos de la SEC contra la teoría del impacto parecen ser una manifestación concreta de esas preocupaciones regulatorias.
Como detalla la orden de la SEC, Impact Theory vendió tres niveles de NFT, denominados “Claves del fundador”, de octubre a diciembre de 2021. Incluían niveles “Legendario”, “Heroico” e “Implacable”. La compañía proyectó la compra de una Founder’s Key como una inversión en el negocio, enfatizando su ambición de “construir el próximo Disney”. Sin embargo, la SEC descubrió que estos NFT, comercializados entre inversores como contratos de inversión, eran valores. Sin una exención válida, la oferta de dichos valores debe registrarse, proporcionando a los inversores la información y salvaguardias necesarias.
El enfoque regulatorio de tratar las NFT como valores contrasta con la postura de algunos reguladores europeos. Por ejemplo, la Autoridad de Supervisión Financiera de Alemania, BaFin, declaró en marzo de 2023 que las NFT no califican como valores. A pesar de las diversas perspectivas regulatorias, está claro que la clasificación y regulación de las NFT y otros criptoactivos seguirá siendo un tema desafiante a nivel mundial.
Al aceptar las conclusiones de la SEC, Impact Theory aceptó medidas que incluían una orden de cese y desistimiento, el pago de más de 6,1 millones de dólares en multas e intereses y el establecimiento de un Fondo Justo para devolver el dinero a los inversores. También acordaron eliminar cualquier regalía futura de las transacciones del mercado secundario que involucren las Llaves del Fundador.