El Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ) ha acusado a tres personas de cargos penales relacionados con su presunta participación en un esquema piramidal criptográfico que robó 1.890 millones de dólares a las víctimas.
Sam Lee, nativo de Australia, supuestamente cofundó “HyperFund”, una plataforma de inversión en línea que afirmaba falsamente que los inversores que compraran “membresías” recibirían entre el 0,5% y el 1% diario en recompensas pasivas hasta que la empresa duplicara o triplicara su inversión inicial.
HyperFund afirmó fraudulentamente que las recompensas procedían de ingresos de la criptominería a gran escala, según un nuevo comunicado de prensa del Departamento de Justicia. Supuestamente, la operación minera no existía y la plataforma supuestamente comenzó a detener los retiros de los clientes en julio de 2021.
Lee fue acusado de conspiración para cometer fraude de valores y fraude electrónico y enfrenta una sentencia máxima de cinco años de prisión.
El Departamento de Justicia también acusó a Rodney Burton, residente de Miami, de un cargo de conspiración para operar un negocio de transmisión de dinero sin licencia y un cargo de operar un negocio de transmisión de dinero sin licencia. Burton supuestamente promovió HyperFund.
Una de las otras promotoras de la plataforma, Brenda Chunga, residente de Maryland, se declaró culpable de conspiración para cometer fraude de valores y fraude electrónico y enfrenta hasta cinco años de prisión. Chunga también acordó pagar al menos 3 millones de dólares en restitución a las víctimas.
En una acción paralela, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) también acusó a Lee y Chunga de violar las disposiciones antifraude y de registro de las leyes federales de valores.
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