A fines de enero de 2022, el miembro del parlamento belga Christophe De Beukelaer se convirtió en el primer político europeo en convertir su salario a Bitcoin (BTC). Para celebrar el aniversario de este experimento, Cointelegraph contactó a un legislador para saber más sobre su experiencia.
En 2022, Beukelaer, que representa al partido del Centro Democrático Humanista (CDH), citó el ejemplo del alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, y cómo los políticos estadounidenses están trabajando para hacer que sus estados o ciudades nativos sean centros de Bitcoin para justificar su decisión. El salario mensual del parlamentario de Bruselas de 5500 euros (6140 dólares) se convertiría a Bitcoin utilizando la plataforma de comercio de criptomonedas Bit4You.
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“Hice este acto político de pagar en Bitcoin para defender ideas políticas”, compartió Beukelaer, citando cuatro: defender la libertad financiera y las oportunidades económicas y combatir el analfabetismo financiero y el modelo de crecimiento. El último es quizás el más interesante, ya que el legislador, que se autodenominó “ambientalista pragmático”, ve un vínculo claro entre Bitcoin y la cláusula ambiental:
“¿Qué hace el banco central cuando imprime dinero como lo ha hecho en los últimos años? Da la ilusión de recursos infinitos y, por lo tanto, alienta a todos los actores económicos a producir y consumir más y más”.
Beukelaer consideró que su experimento fue exitoso tanto para colocar a Bélgica en el mapa criptográfico mundial como para alentar a los funcionarios locales a educarse sobre los activos digitales:
“Muchos políticos se dijeron a sí mismos: ‘De Beukelaer no es anarquista. Si está interesado en Bitcoin, debe haber algo interesante detrás de eso’”.
¿Fue cómodo en términos prácticos? La respuesta positiva es difícilmente imaginable, dada la caída de BTC de casi $38 000 en enero de 2022 a $17 246 en el momento de la publicación en enero de 2023, pero el parlamentario no consideró su experimento como una estrategia económica desde el principio:
“Fue un acto político y no un gesto financiero. Como los que se dejan bigotes en noviembre para combatir el cáncer de próstata. Pongo este salario en Bitcoin en una billetera fría todos los meses y no lo he tocado. Mi objetivo no era vivir en criptomonedas”.
Mientras se da el primer paso importante hacia la regulación paneuropea, Beukelaer destacó las reservas de los mercados en la legislación de criptoactivos: las restricciones excesivas impuestas a la tenencia personal de criptografía o la forma en que se consideran las monedas estables.
Europa se dirige hacia tiempos difíciles, cree el político, citando las crisis en el suministro de energía y el clima, y el surgimiento de líderes autoritarios. Es en ese sentido como los países occidentales comprenderán gradualmente la utilidad de las criptomonedas.