El gobernador del banco central de Francia ha abogado por requisitos más estrictos para la concesión de licencias de criptomonedas, informó Bloomberg News el 5 de enero.
El gobernador del Banco de Francia, Francois Villeroy de Galhau, le dijo al sector financiero de París esta semana que Francia debería promulgar regulaciones lo antes posible.
Villeroy de Galhau dijo durante un discurso:
Todo el desorden en 2022 alimenta una creencia simple: es deseable que Francia pase a una licencia obligatoria de DASP lo antes posible, en lugar de solo el registro.
En Francia, la licencia completa de proveedor de servicios de activos digitales (DASP) es actualmente opcional, y Bloomberg sugiere que ninguna empresa francesa ha obtenido una licencia completa. En cambio, unas 60 empresas han obtenido un “registro” menos extenso de la Autoridad de Mercados Financieros (AMF) del país, según el informe de hoy.
Una de esas empresas es Binance, que recibió permiso para operar en Francia en mayo pasado. Otras empresas registradas se pueden ver en el sitio web de la AMF.
Villeroy de Galhau no es el único funcionario francés que ha pedido más regulaciones. En diciembre, el miembro del Senado Hervé Maurey propuso una enmienda que eliminaría la opción de “registro”. Maurey citó el colapso de FTX como una de las razones para regulaciones más estrictas y calificó el evento como un momento de “ajuste de cuentas y conciencia”.
Incluso si las personas en particular no logran introducir regulaciones más estrictas, es probable que las futuras reglas a nivel europeo hagan que la licencia DASP sea obligatoria en 2026.
Una regulación más estricta podría evitar que Francia se comprometa plenamente con la criptoindustria. Actualmente, se reconoce que las regulaciones de Francia son algo amigables con las criptomonedas: el programa DASP anterior se describe con frecuencia como un “toque ligero”, y el país también mantiene un programa de visa ICO que permite la venta de tokens nuevos.
Sin embargo, Francia también tiene una serie de políticas estrictas que podrían desalentar el crecimiento en el sector de las criptomonedas, como las restricciones a la publicidad relacionada con las criptomonedas y un impuesto fijo del 30 % sobre todos los ingresos por inversiones en criptomonedas.