El Asesor de Seguridad Nacional (NSA) de Nigeria está dispuesto a etiquetar el comercio de criptomonedas como una amenaza a la seguridad nacional, lo que indica una inminente represión de las transacciones de criptomonedas entre pares (P2P), según informes de los medios locales y fuentes de CryptoSlate.
La medida sigue a la decisión de al menos tres importantes empresas emergentes de tecnología financiera nigerianas (Moniepoint, Paga y Palmpay) de bloquear cuentas involucradas en transacciones criptográficas e informar dichas actividades a las autoridades.
Según el director ejecutivo de Moniepoint, Tosin Eniolorunda, se espera que la clasificación de la NSA allane el camino para nuevas regulaciones que prohíban el comercio de criptomonedas P2P, y se espera un anuncio oficial pronto.
Esto representa un cambio notable en la postura regulatoria, particularmente después de que la administración de Bola Tinubu había mostrado previamente una actitud más indulgente hacia las criptomonedas. De hecho, en diciembre de 2023, el Banco Central de Nigeria levantó una prohibición de dos años sobre las transacciones criptográficas, lo que sugiere un entorno regulatorio más acogedor.
Sin embargo, en los últimos meses se ha producido una reversión de esta tendencia, y las autoridades culpan a los criptoespeculadores de exacerbar la volatilidad del mercado de divisas (FX). La prohibición propuesta del comercio P2P se basa en la afirmación del Banco Central de que los comerciantes de criptomonedas explotan este método para manipular la naira nigeriana mediante esquemas de bombeo y descarga.
El gobernador del Banco Central, Olayemi Cardoso, alegó en febrero de 2024 que Binance había facilitado 26.000 millones de dólares en transacciones imposibles de rastrear, lo que provocó una represión del intercambio y la congelación de más de 1.000 cuentas bancarias vinculadas a transacciones P2P.
En un acontecimiento relacionado, recientemente se ordenó a cuatro destacadas empresas de tecnología financiera que detuvieran la apertura de nuevas cuentas de clientes, aunque el origen de esta directiva sigue sin estar claro.
El director ejecutivo de Moniepoint, Tosin Eniolorunda, confirmó que la medida fue a instancias de la NSA, quien expresó su preocupación por la facilidad con la que las plataformas fintech facilitan la apertura de cuentas, particularmente cuentas de nivel 3.
Si bien un portavoz de la NSA se negó a proporcionar más detalles, este acontecimiento pone de relieve el creciente escrutinio sobre la rápida proliferación de cuentas facilitadas por las nuevas empresas de tecnología financiera. Los bancos tradicionales han expresado durante mucho tiempo su preocupación de que dichas cuentas sirvan como conductos para fondos ilícitos.
En respuesta a estas preocupaciones, el Banco Central modificó sus reglas en diciembre de 2023, obligando a las nuevas empresas de tecnología financiera a verificar las identidades de todos los titulares de cuentas antes de marzo de 2024.
Mientras Nigeria se prepara para nuevas medidas regulatorias en el espacio criptográfico, el destino del comercio P2P sigue siendo incierto en medio de crecientes preocupaciones de seguridad nacional y paisajes regulatorios en evolución.