Vitalik Buterin, cofundador de Ethereum, ha expresado una vez más su preocupación por el estado de la regulación de las criptomonedas, particularmente en Estados Unidos. En respuesta a un usuario de Warpcast, una plataforma descentralizada de redes sociales, Buterin destacó una paradoja regulatoria que, en su opinión, está sofocando el crecimiento y la integridad de la industria.
Buterin observó que el marco regulatorio actual tiende a permitir que proyectos con promesas vagas y retornos potenciales ambiguos operen con relativa libertad. Y, de manera contraproducente, los proyectos que ofrecen información transparente sobre los rendimientos y definen claramente los derechos de los inversores a menudo se clasifican como “valores”, sometiéndolos a regulaciones estrictas.
En Estados Unidos, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), bajo el liderazgo del presidente Gary Gensler, ha iniciado una serie de demandas para clasificar las criptomonedas como valores. En su último esfuerzo, la SEC demandó a Consensys, alegando que los servicios de intercambio y apuesta de su billetera MetaMask violan las leyes de valores.
Muchos en la industria de la criptografía han criticado el enfoque de “legislación mediante litigios” de la SEC. En abril, la Blockchain Association y la Crypto Freedom Alliance de Texas acusaron a la SEC de extralimitación regulatoria en una demanda.
La postura de la SEC sobre las criptomonedas, que Buterin describe como “anarcotiranía”, crea una estructura de incentivos perversa que, según él, es más dañina para el espacio de las criptomonedas que una anarquía regulatoria completa o una tiranía regulatoria estricta. Según él, el enfoque de la SEC fomenta la creación de productos y servicios “inútiles”.
El escribio:
“El gradiente de incentivos que crea esta “anarcotiranía” termina siendo peor para el espacio que la simple anarquía o la simple tiranía”.
Pidió un cambio en el enfoque regulatorio, abogando por un escenario en el que emitir un token sin una propuesta de valor clara a largo plazo se considere más riesgoso. Por el contrario, se deben salvaguardar los proyectos que proporcionen un plan a largo plazo transparente y creíble y se adhieran a las mejores prácticas. Se podría argumentar que la sugerencia de Buterin tiene sentido lógico y crearía un entorno que fomente la innovación de productos genuinos de valor.
Según Buterin, lograr este equilibrio requeriría una colaboración seria entre los reguladores y la industria de la criptografía.
Buterin ha enfatizado constantemente la importancia de contar con regulaciones claras y justas. Con frecuencia ha argumentado que el panorama regulatorio actual obstaculiza la innovación y fomenta la deshonestidad. En declaraciones anteriores, ha pedido un entorno regulatorio que respalde proyectos genuinos y al mismo tiempo proteja a los inversores de esquemas fraudulentos.
Sus últimos comentarios refuerzan esta postura, instando a los reguladores y a los participantes de la industria a entablar un diálogo de buena fe. Buterin cree que trabajando juntos, pueden desarrollar un marco regulatorio que promueva la transparencia, la responsabilidad y el crecimiento sostenible en la industria de las criptomonedas.
La defensa de Buterin de una regulación equilibrada enfatiza la necesidad de un enfoque matizado que pueda fomentar la innovación y al mismo tiempo garantizar la protección de los inversores. Sus ideas siguen siendo una voz guía en el debate en curso sobre el futuro de la regulación de las criptomonedas.